Cuando se habla tanto de las energías renovables es oportuno analizar cómo los ciudadanos están aceptando las instalaciones existentes en la geografía española de paneles solares fotovoltaicos y aerogeneradores eólicos para producir electricidad. También se comentará que se está haciendo para que no sean generadoras de rechazo social y puedan servir de apoyo en convivencia con la agricultura.
Energías presentes en la naturaleza
Esto está motivado por el cambio climático, uno de los mayores retos a que la humanidad se ha enfrentado en toda su historia por tener carácter global; sabido es que la actividad humana, en parte, es responsable del aumento de la concentración atmosférica de gases de efecto invernadero desde revolución industrial del siglo XVIII.
Recordamos que, según Real Academia Española, son las Energías Renovables: Energía que procede de un recurso presente en la naturaleza de manera prácticamente inagotable y según Real Academia de la Energía, creada con objeto de acercar conceptos básicos de energía a las personas: Energía Renovable es aquella que se obtiene de fuentes que no se agotan con el tiempo y que son consideradas sostenibles a largo plazo, basadas en procesos naturales. No generan emisiones de CO2, son menos dañinas al medio ambiente, proporcionando suministro más estable y seguro que combustibles fósiles: emisores de grandes cantidades de gases y sujetos a fluctuaciones en precio y oferta.
Opción por la eficiencia y la salud
El sector energético actualmente es responsable de más del 75 % de estos gases en la UE, siendo necesario hacer frente a este desafío aumentando el uso de energía renovable y mejorando la eficiencia energética, que mitigará el cambio climático y ayudará a contrarrestar impactos negativos de energías fósiles en la biodiversidad y en la salud de las personas.
Con estas instalaciones renovables es inevitable que surjan tensiones, territoriales y sociales, debidas a falta de información sobre relación entre estas energías y actividad agraria. Para evitarlas distintos sectores están poniendo en marcha Guías de Buenas Prácticas con Hojas de Ruta para cumplir el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima español con mecanismos de actuación para “Desarrollo de energías renovables compatible con biodiversidad y protección de ecosistemas” (Medida 1.1) y “Desarrollo de energías renovables compatible con el territorio y desarrollo rural” (Medida 1.2) del PNIEC.
En marzo 2023 Parlamento y Consejo Europeo llegaron al acuerdo de elevar el objetivo de energía renovable al 42.5 % en la UE para 2030, y en España el PNIEC quiere alcanzar 48 % de energía renovable en consumo final de energía y un 81 % en la generación eléctrica en nuestro país.
Principales fuentes renovables:
-Energía solar: con radiación solar producir calor o electricidad utilizando paneles o concentradores solares.
-Energía eólica: capturar el viento mediante turbinas eólicas para generar electricidad.
-Energía hidráulica: con agua en movimiento, ríos o mareas, capturarla mediante presas, turbinas o sistemas de corriente de agua y generar electricidad.
-Energía geotérmica: capturar calor de la Tierra perforando pozos geotérmicos para producir calor o electricidad.
-Biomasa: utilizar materia orgánica: residuos agrícolas, forestales o de animales como combustible para producir calor o biocombustibles.
Existen otras fuentes, como olas o biomasa residual, pudiendo ser utilizadas para generar energía limpia. Actualmente hay un amplio campo de estudio.
Beneficios y desafíos energéticos
El Uso de Energía Renovable en España se ha acelerado su despliegue desde 2018 generando beneficios ambientales, económicos y sociales, pero también desafíos, tensiones y conflictos, siendo necesario conocer la situación actual y el conocimiento técnico existente. En 2023 alrededor del 61,3% fue potencia eléctrica renovable de España, superando a la no renovable, previendo aumentar 7% anual, siendo en marzo 2024 ya alrededor del 65,2%, pero quedando mucho por hacer con las otras fuentes de energía renovable.
Haremos algo de historia de tecnologías renovables generando electricidad: primera fue la hidráulica como principal fuente. En 2009 fue sobrepasada por la eólica, situada en primer lugar desde entonces por aerogeneradores instalados. La energía solar obtuvo un máximo de generación fotovoltaica, mucho menor en utilización térmica en edificación para generar calor y frio y en transporte para biocombustibles.
¿Cuál es esta situación actual en España?: tenemos muchas instalaciones de fotovoltaica: sobre todo grandes y menos pequeñas (autoconsumo), así como eólicas y muchas menos de: energía solar térmica, biomasa y geotérmicas.
En cuanto a la fotovoltaica para autoconsumo según Unión Española Fotovoltaica, asociación mayoritaria de la energía solar en España, en 2023 la instalación en Industrias tuvo el mayor crecimiento, seguido sector Residencial, continuando con Comercial y menos en las Aisladas, teniendo una caída general del 32% respecto a 2022, posiblemente por la bajada del precio de la luz, sin embargo aumento 42% respecto a 2021.
Instalaciones destacables
Mencionando las que existen en el mundo: cuatro de las diez fotovoltaicas más grandes están en India, Egipto, China y Emiratos Árabes (ejemplo: tienen dos instalaciones fotovoltaicas muy grandes, una de ellas con 3,2 millones de paneles solares dispuestos en 8 km²) y en España, siendo el séptimo país en potencia instalada de Europa, estamos detrás de algunos países del norte que tienen menos horas de sol, estando por ahora las más grandes instaladas en poblaciones de Sevilla, Ciudad Real y Murcia.
En cuanto a potencia eólica instalada: España es el quinto país del mundo detrás de China, Estados Unidos e India y segundo en Europa detrás de Alemania. Es la primera fuente de generación eléctrica española en 2023, con más de 22.000 aerogeneradores instalados, pero muy por debajo de lo que sería necesario instalar para poder alcanzar en 2030 el objetivo eólico contemplado en PNIEC, esperando similitud en resultados en 2024.
Futuro: objetivo en 2030
Reducir el consumo de energía primaria al 32,5% en la UE, en España según PNIEC conseguir 39,5% (en 2023 fue menos del 29%). Necesario: aumentar autoconsumo fotovoltaico, tecnologías de almacenamiento, desarrollo de redes inteligentes de distribución, tecnologías como geotermia, aerotermia, bombeo hidráulico, etc… para potenciar eficiencia energética, mediante hibridación de las diferentes tecnologías renovables.
Las instalaciones existentes motivan rechazos, que han motivando disminución en 2023, por causas como:
– Subvenciones: no están llegando a tiempo, generan desconfianza.
– Se hacen sin contar con los habitantes rurales.
– Instalaciones: no se desarrollan de común acuerdo con el propietario del terreno.
– Grupos denominados ambientalistas: solo tienen visión del paisaje o de la problemática a nivel local, sin considerar problemática ambiental a nivel general.
– Personas: se preocupan para que todo permanezca tal como está para siempre.
En resumen existe mucha desinformación y descuido de las poblaciones rurales que retrasa la transición energética y oportunidades, sufriendo bulos y falsas noticias.
Existe Informe del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación desmontando mitos extendidos e intentando explicar “Si en España realmente las placas solares están quitando terreno a la producción de alimentos” concluyendo que “durante más de una década, la desinformación existente sobre coexistencia entre agricultura, ganadería y energía solar ha sido motivo de debate y, en ocasiones, conflicto pues la convivencia es posible y, en el 90% de los proyectos, enriquecen ambas actividades”.
Conclusiones
-Importante considerar cómo los ciudadanos aceptan las instalaciones fotovoltaicas y eólicas para producir electricidad. Gran desinformación.
-Necesario facilitar convivencia entre uso agrícola del suelo como actividad prioritaria, frente a tecnologías renovables.
María del Rosario Heras Celemín
